Un bebé “de nueve meses de edad” podemos decir que aún es un ser inmaduro, desde el punto de vista sensoriomotor, que va a ir avanzando gracias a sus relaciones con las personas que los rodean y con el entorno.
Desde la fisioterapia trabajamos la Atención Temprana (AT), que es el “conjunto de intervenciones, dirigidas a la población infantil de 0-6 años, a la familia y al entorno, que tienen como objetivo dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen el riesgo de padecerlos”.
Es importante tratar al bebé a partir de la 3º semana y antes del sexto mes, ya que la evolución es muy activa en este periodo.
¿Qué hace un/a fisioterapeuta en pediatría?
¿Qué podemos tratar desde la fisioterapia?
Técnicas utilizadas:
Cólicos del lactante
Cuando un bebé sano tiene varios períodos a la semana de inquietud, llanto agudo y dificultad para que lo tranquilicen, es un signo de una afección conocida como «cólico del lactante». Se estima que el 40% de los bebés recién nacidos lo sufren.
La fisioterapia pediátrica realiza una técnica visceral que logra armonizar, relajar y mejorar la elasticidad del intestino del bebé. La terapia consiste en realizar ligeras presiones, desde la zona superficial de la tripa a la profunda, penetrando por capas a medida que el cuerpo va relajándose hasta conseguir mejorar la elasticidad del intestino.
Mediante este tratamiento el bebé sentirá alivio y mejorará la alimentación, el tránsito intestinal, la evacuación de heces y gases, lo que hará que el llanto descontrolado se reduzca y aumente el sueño y bienestar de nuestro pequeño.